¿Puede un packaging ser tan sugerente como el regalo que hay en su interior? Nosotros creemos que sí y por eso te lo demostramos con algunos ejemplos. 

En navidades son muchas las cosas que preparamos con antelación; desde las compras hasta las comidas, pasando también por la ropa que vamos a llevar en esos días tan especiales de reencontrarse con personas que hace semanas, o incluso meses, que no vemos. Por eso, intentamos cuidar todos los detalles, para hacer esos días más importantes si cabe. Sin embargo, ¿pones la atención que se merece en el embalaje de tus regalos? De acuerdo, lo importante es el interior, la intención y participar, pero del mismo modo que a nadie le apetece un plato con una presentación horrenda, a todos nos gusta recibir y desempaquetar regalos hermosos y originales. En este post vamos a repasar algunas de las tendencias más originales para empaquetar tus regalos:

1. Simple y eco

Ahora esta en auge el papel de aspecto natural, eco o reciclado. Según qué vayas a regalar o cómo sea la persona que lo vaya a recibir esta es sin duda alguna, una apuesta segura, económica y muy interesante a tener en cuenta.

2. Con hojas y ramitas

Los elementos naturales siempre aportan un plus de exclusividad y aire fresco. Además de ser más que baratos, pues los puedes encontrar en parques, bosques o campos cercanos a tu lugar de residencia. Eso sí, intenta evitar las flores o plantas que vayan a marchitarse rápido, pues entonces perdería todo su efecto.

 3. Con elementos de madera

La madera se asocia con la calidad, la experiencia y el buen gusto. Así pues, nada mejor que introducir elementos bonitos de madera en tu packaging.

4. Con periódicos muy viejos, papeles estampados o mapas

A veces no hace falta invertir mucho tiempo y dinero en algo para que sea, simplemente, ideal; basta con ponerle mimo y cariño. Añadir un mapa o un periódico de algún día especial en el embalaje puede aportar un toque vintage y emotivo fantástico.

5. Con sopas de letras caseras

Basta con crearlas con documentos word, unirlos y… voilà! Si haces como en la foto y remarcas la palabra clave en rojo, seguro que te ganarás más de un aplauso o, al menos, una tierna sonrisa.

6. Simplemente… ¡Por todo lo grande!

A veces los objetos son imposibles de empaquetar. O eso es lo que crees en un inicio porque, en realidad, TODO es empaquetable. Te animamos a intentarlo porque, aunque el resultado no sea perfecto en cuando a estética, seguro que será más que adorable. O, al menos, muy divertido.