Los relojes son los siguientes dispositivos elegidos por la industria de la tecnología para recibir una inyección de “inteligencia”. Teléfonos, coches, viviendas, pulseras… cada vez es más difícil encontrar productos “no-inteligentes” y los relojes no esquivan el curso del tiempo. El pasado año confirmó esta tendencia y 2014 parece el momento indicado para el “boom” de los smartwatches.
Sin embargo, todavía no está claro cual será su nueva utilidad. Por lo visto hasta ahora la información que transmitían las agujas de toda la vida se complementa con la función de “chivato” de lo que ocurre en nuestro smartphone, mostrando en la pantalla las notificaciones procedentes de las apps, por ejemplo. Una alianza que tiene buena pinta es la relación entre smartwatches y coches, que permitirá conocer las condiciones del tráfico o recibir alertas de peligro en la calzada.
El tiempo y los desarrolladores dirán si a estas prestaciones se le añaden otras que creen una experiencia de uso totalmente nueva. ¿Qué marcas están trabajando en sus smartwatches? Sony, Nike, Microsoft, Apple – naturalmente se llamará iWatch – o la asiática HTC.
Todas quieren ir tras la senda del Pebble, el smartwatch más vendido hasta hoy. Un precio competitivo y un software abierto – apto para iPhone y Android – fueron las claves de su gran aceptación en 2013.
Fotos | Karlis Dambrans y Apple