No hace falta ir muy lejos para poder disfrutar de playas paradisíacas que nos harán sentir en el lugar más recóndito del mundo. En la península ibérica y en las islas baleares podemos encontrar playas de arena fina, aguas cristalinas, accesos imposibles, rocas pintorescas y un paisaje espectacular. Te proponemos 7 de esas playas.
Zahara de los atunes (Cádiz)
Zahara de los atunes es una entidad local autónoma que pertenece al municipio de Barbate, en la provincia de Cádiz, Andalucía.
Su principal atracción turística son sus playas, con unas preciosas puestas de sol. Una cinta de 8 kilómetros de arena fina y aguas claras, que van desde el pueblo de Zahara hasta el Cabo de Gracias, con zonas de accesos complicados y playas vírgenes gracias a su reserva militar. Una de las zonas más recomendables por sus vistas es en la desembocadura del río Chacón, donde confluyen el mar y el río, creando un paisaje espectacular.
Playa del Silencio (Asturias)
Es una playa virgen y salvaje, de aproximadamente 500 metros, situada en el pueblo de Castañeras, en el concejo de Cudillero, Asturias.
Si vas a este paraíso, debes saber que es una playa de guijarros, así que se recomienda visitarla con escarpines o cangrejeras. Es perfecta para hacer snorkel.
La carretera no llega a la playa y el corto paseo de 10 minutos que lleva hasta ella nos deja entrar en un mundo más tranquilo, más íntimo. Tú, el mar y un paisaje increíble rodeado de imponentes acantilados, y protegido por un mar Cantábrico de aguas turquesa y verde esmeralda.
Praia de Dona Ana (Lagos, Portugal)
Ha sido considerada una de las mejores playas del mundo y es una de las más famosas del Algarve, en Lagos, Portugal.
Tiene un arenal impecable, agua cristalina abrigada por acantilados y rocas que nos regalan un paisaje espectacular, con una puesta de sol excepcional. También es un lugar privilegiado para el parapente, buceo y deportes de agua como vela o esquí acuático. Debes saber que a la Praia de Dona Ana se llega por unas largas escaleras de madera y que, aunque vayas en verano, encontrarás unas aguas sorprendentemente frías.
Cala Aiguablava (Girona)
La Cala d’Aiguablava es una recoleta bahía cerca de Begur, en la Costa Brava, Cataluña.
La arena fina y el agua de color turquesa la hace única y especial en un entorno paisajístico. Se puede llegar en coche, y en transporte público en verano. Es una de las playas más populares de la zona y, si vas en temporada alta, será difícil aparcar cerca. Lo mejor será aparcar en calas cercanas e ir a pie. Tiene duchas, servicio, vigilancia, servicios de ocio, alquiler de hamacas y está adaptada para personas con movilidad reducida.
Macarella (Menorca)
Cala Macarella es una de las playas vírgenes del sur de Menorca, dentro del archipiélago Balear, cerca de la localidad de Ciutadella.
Es una de las playas más espectaculares de la isla, con aguas de color turquesa y arena fina y blanca que te trasportan al Caribe, enmarcada por paredes verticales de blanca roca caliza. Para acceder puedes ir en coche, en transporte público, o acercarte en barco. En la Macarella tenemos el único acceso por tierra a la Macarelleta, su hermana pequeña, que habitualmente está más tranquila.
Praia de Galapinhos (Setúbal, Portugal)
Ha sido considerada la mejor playa de Europa y está situada en la costa de Arrábida, a poco menos de 10 km de la ciudad de Setúbal, cerca de Lisboa, Portugal.
Es una playa tranquila, de agua clara y mar en calma, donde se pueden observar especies marinas y practicar submarinismo. Se debe acceder a pie a través de senderos abruptos que se abren entre matorrales verdes. Al estar rodeada por el Parque Natural de Arrábida, se ha podido evitar la degradación del entorno natural que suele acompañar a la presencia humana y no está nada masificado en comparación con las playas más famosas de Portugal, en el Algarve.
Playa de las Catedrales (Galicia)
También llamada playa de Aguas Santas, está situada en el municipio gallego de Ribadeo, en la costa de la provincia de Lugo, Galicia.
Está declarada monumento natural de la formación geomorfológica de la Rasa Cantábrica, una superficie plana entre el mar Cantábrico y las estribaciones montañosas. Para ir deberás fijarte en la tabla de mareas de esta playa, y coincidir en las épocas del año en las que el nivel del mar desciende, lo que permite recorrer los estrechos pasillos entre los acantilados, grietas y cuevas y pasar bajo sus enormes arcos.
¿Quieres viajar a alguna playa y disfrutarla con todo el equipo? Recuerda que puedes contratar el envío de tus maletas, tabla de surf, equipo de buceo y todo lo que te ha de acompañar con MRW. Puedes encargar el envío de tus maletas en tu oficina MRW más cercana, o en nuestra página web: https://www.mrw.es/enviar/.
