En los últimos años la cadena de suministro se está viendo alterada por 3 factores, cada vez con más peso en nuestra sociedad, y que entre los tres empujan irremediablemente el sector de la logística hacia la digitalización. Se trata de la hiperconectividad, la industria 4.0 y la omnicanalidad. Entre los tres han empezado a crear un nuevo paradigma que encuentra su origen en la llamada “cuarta revolución industrial”, un nuevo escenario que llevará a la logística a ponerse en manos de la metodología más rápida y eficiente nunca antes conocida.

¿En qué se basa la logística 4.0?

La logística 4.0 es la evolución de la logística tradicional, con la que entonces se limitaba al transporte de los productos comerciales. Con este nuevo paso adelante, se asume una comunicación directa y de coordinación supraempresarial que responde a la cadena de suministro. Para hacerlo, deben emplearse métodos como la interconexión y la informática en la nube.

Este nuevo avance de la logística, estrechamente vinculado a la industria 4.0, permite la automatización de la producción basado en el uso de la electrónica. A través de una comunicación directa entre las instalaciones, los productos, las personas, la logística y las máquinas, se puede optimizar la producción.

La digitalización en las empresas de transporte

Hoy en día, la digitalización ha llegado a todos los rincones de nuestra sociedad. Tanto a nivel individual para la población, como a nivel colectivo para las empresas. En el ámbito comercial, su efecto ha creado nuevas formas de concebir la producción y mejoras en los procesos internos y de gestión de operaciones. Un hecho que, aplicado junto con la conectividad, permite el control total de los tiempos de cada tarea.

Aplicado a un caso práctico, con la logística 4.0, se puede por ejemplo, colocar un rastreador GPS en los envíos. De esta manera, varios de los procesos incluidos en la trazabilidad pueden ser digitalizados y automatizados para ahorrar costes en tiempo y dinero. Desde el cálculo de las rutas, hasta la geolocalización de los clientes y la automatización de pagos y cobros.

Los retos de la logística 4.0

La logística 4.0 es una nueva metodología para transformar la cadena de suministro que, gracias a la digitalización y a los avances tecnológicos, ya ha empezado a implantarse. Sin embargo, antes de poder implantarse con normalidad como nuevo modelo logístico, debe superar algunos retos presentes en la actualidad:

La logística inteligente

Para una logística eficiente, es necesario estar al día en cuanto a nuevos avances tecnológicos y soluciones que faciliten las necesidades de los clientes. Esto significa la utilización de software de gestión especializado, la automatización de los procesos clave y el control en los almacenes.

Anticipar las necesidades de los clientes

Anticiparse a los deseos de los clientes es fundamental para predecir las futuras tendencias de mercado y sus necesidades. Por ello, incorporar el Big Data en la logística puede ser un remedio para contar con más información fiable.

Mediante herramientas de análisis adecuadas, se pueden cruzar los datos de los clientes con diversos factores clave que determinen el éxito o el fracaso del proceso logístico.

Reducción de los tiempos de respuesta

Al trabajar con una corta producción, la rotación de las referencias tanto en tiendas físicas como online obliga a mantener tiempos de respuesta reducidos. Con lo cual, minimizar estos tiempos es un factor clave para conseguir satisfacer las exigencias de los clientes.

Incentivar la omnicanalidad

Con la expansión de la digitalización, cada vez hay más canales por los que cualquier cliente y/o usuario puede ponerse en contacto con un negocio. Unificar la gestión de pedidos y acelerar su preparación, puede ayudar a poner fin a la discordancia en los canales.

La trazabilidad

Una mejora de la logística debe ir siempre acompañada de un avance en los métodos de trazabilidad de los pedidos. En estos casos, las etiquetas RFID y los sistemas informáticos de la cadena de suministro juegan un papel clave.

Adaptarse a este nuevo escenario integrando las exigencias propias de la Logística 4.0 es uno de los retos del presente para una empresa líder en transporte urgente como MRW. Sin duda, nos fortalece contar con una ventaja: compartimos los principales valores que caracterizan a este nuevo paradigma, como son la capilaridad, trazabilidad, omnicanalidad y el afán para mejorar la eficiencia en la Última milla.